Melanie Flint
En cuanto Louis llamó al
timbre, dos niñas pequeñas se abalanzaron sobre él.
- ¡LOUIS! –gritaron las dos
a la vez y después que él les dijera algo que no llegué a oír, las dos rieron
dándole un beso en la mejilla.
Detrás de las ellas dos,
salieron otras dos chicas más, mayores que las gemelas y una mujer, que debía
ser la madre de Louis. Ellas también lo abrazaron con fuerza mientras le decían
lo mucho que le habían echado de menos. Cuando se deshizo del abrazo, me miró
ya que aún seguía al lado del coche y me sonrió.
- Chicas, ella es
Melanie.-me presentó.- Mel, .-dije mirándome.- Jay, mi madre, y mis hermanas,
Charlotte, Felicite, Daisy y Phoebe.-las señalaba según las iba nombrando y yo
intenté quedarme con los cinco nombres en la cabeza.
- Encantada.-dije. La verdad
es que todo esto me daba demasiada vergüenza, siempre había sido muy tímida a
la hora de conocer gente nueva.
- Ven, no te quedes ahí,
cielo.-me dijo su madre, me acerqué y me saludó con un par de besos en la
mejilla.
Entré en la casa después de
ella, y tras de mí las dos más mayores, Charlotte y Felicite si no recuerdo
mal. Entre las tres empezaron a enseñarme la casa. Era muy bonita, al entrar,
había un largo pasillo que moría en unas escaleras, una puerta a la izquierda
llevaba a la cocina y en la pared de enfrente había dos puertas: una que daba a
un enorme salón con una puerta que llevaba al jardín y otra a un baño que
completaba la parte de abajo.
- Y bueno, arriba están las
habitaciones.-dijo Jay.- Lotte, Fizzy, ¿se lo enseñáis mientras termino de
hacer la comida?
- Claro.-respondieron las
dos y Jay desapareció en dirección a la cocina.
- Ven.-dijo Lotte tirando de
mi mano hacia las escaleras y subimos.
- Esta es la de mamá.-dijo
Fizzy abriendo la primera puerta a la derecha.
- Nada interesante.-dijo
Lotte y reímos.- La siguiente es la de las gemelas.-dijo entrando en la de en
frente. Una habitación pintada en un rosa clarito con dos camas iguales y un
montón de juguetes tirados por el suelo.
- Esta es la nuestra.-siguió
Fizzy entrando en una al lado de la de su madre.- Pero hoy será la tuya
compartida con Lotte.- Esta estaba pintada en lila aunque una de las paredes
estaba completamente cubierta por posters y las estanterías estaban llenas de
muñecas.
- ¿Y tú? –no pude evitar
preguntarlo.
- Dormiré con las
gemelas.-dijo.
- No hace falta, yo puedo
dormir en el sofá.
- A mi no me importa que
duermas conmigo.-dijo Lotte.
- Ni a mi dormir con las
enanas.
- ¿En serio? –dije.
- Claro.-contestaron a la
vez y sonreí.
- Aún no hemos terminado el
tour.-dijo Fizzy y salimos de la habitación.
- Y tachán, por último la
habitación de Lou.-dijo Lotte abriendo la puerta de la habitación frente a la
suya. Una habitación pintada en azul, con cd’s y libros en las estanterías.
- No te fíes de su aspecto
ahora está ordenada pero solo porque ya no vive aquí que si no…una leonera es
una maravilla comparado con esto.- dijo Fizzy bajando un poco la voz y yo reí.
- Te he oído enana.-dijo
Louis subiendo las escaleras. Se acercó hasta nosotras para dejar su maleta en
la habitación.- No las hagas caso.-me dijo.
- No se por qué creo más lo
que ellas dicen.-dije.
- ¡Perfecto! Todas en mi
contra.-dijo haciéndose el indignado mientras las tres reíamos.
Louis Tomlinson
- ¿Qué te parece? –le
pregunté cuando mis hermanas se habían ido.
- Hm, no está mal.-contestó
ella riendo mientras inspeccionaba toda la habitación con la mirada y se
quedaba observando una foto mía de pequeño.
- ¿De qué te ríes?
- De la cara de travieso que
tienes en esta foto.
- Mentira, yo era un
angelito.
- Sí, claro, ¿pretendes que
me crea eso? Apuesto a que eras un trasto.-dijo.- Pero bueno, al menos eras un
niño muy mono.
- ¿Era? ¿Cómo que era? Lo
sigo siendo.-protesté y ella rió, cosa que me encantaba después de cómo había estado la noche anterior.
- ¡Ya está la comida! –gritó
mi madre desde el salón supongo.
Bajamos en cuanto la escuchamos
y ya estaban todas mis hermanas sentadas a la mesa, nos sentamos nosotros
también y empezamos a comer.
- Lou, ¿sabes que han puesto
una feria en el parque? –me dijo Daisy.
- ¿En serio? –dije
haciéndome el sorprendido.- ¿Qué queréis decirme con eso?
- Que si nos vas a
llevar.-dijo Phoebe.
- Hm, no sé, no sé.-hice una
pausa y miré a Melanie.- ¿Tú crees que debería llevarlas, Mel?
- ¿Por qué me metes a mí?
–dijo y todos reímos. Las pequeñas la miraban con cara de cachorrito.- Pero yo
creo que sí, míralas, son adorables.-
- Por fa, Lou, por fa.-dijeron
las dos aunque esta vez se las unieron también Lotte y Fizzy.
- Está bien, está bien,
iremos.-dije.
Seguimos comiendo mientras
mis hermanas me avasallaban con preguntas sobre la banda y demás. Terminamos de
comer y entre Mel, Lotte, Fizzy y yo ayudamos a mi madre a recogerlo todo.
Después, nos sentamos un rato en el sofá, aunque las pequeñas no paraban de
decir que cuando nos íbamos a la dichosa feria así que duramos poco viendo la
tele. Salimos de casa los seis y fuimos hasta el parque donde estaba la feria,
con un montón de atracciones en las que claro, las chicas querían montar a toda
costa. Subimos a la noria, al tren de la bruja, los coches de choque, compramos
algodón de azúcar y me hicieron conseguirlas un peluche a cada una en uno de
esos puestos que ponen a prueba tu puntería. Volvimos a casa para la hora de la
cena.
- ¿Qué tal lo habéis pasado?
–preguntó mi madre en cuanto entramos.
- ¡Genial! –contestaron las
gemelas abrazando su rana de peluche.
- ¿Y eso? –volvió a
preguntar señalando los peluches.
- Nos los ha conseguido
Lou.-dijeron.
- Sí, después de un millón
de intentos.-dijo Mel. Lotte y Fizzy rieron.
- Ja-Ja muy
graciosa.-contesté a lo que me sacó la lengua.
Hey girls! Ya teneis un capítulo más aunque tengo que decir que no me termina de convencer mucho, no sé por qué, pero bueno, haré mejor el siguiente. Espero que os guste un "pocito" al menos. Jajaja. Muchísimas gracias por comentar y por leer. Love you all <3
P.D.: He muerto con ese gif de Lou.